Fernando G. Sanz: “En el paciente enfoco compromiso, empatía y los últimos avances tecnológicos”

Dirigir y gestionar un equipo puntero de fisioterapeutas no es tarea fácil; motivarlos y superarse día a día, tampoco, y aplicar las nuevas tendencias para aliviar las patologías de los pacientes de la forma más eficaz posible solo es un objetivo alcanzable para muy pocos. Fernando García Sanz, alumni de Fisioterapia de Salus Infirmorum, director del Máster Universitario en Fisioterapia Deportiva y director del Servicio de Fisioterapia de la Clínica CEMTRO, cumple con todas estas premisas y centra su esfuerzo en dominar y mejorar la última tecnología disponible para acortar los tratamientos. En esta entrevista nos cuenta su evolución profesional, su experiencia en diferentes centros sanitarios y la referencia que mantiene de su paso por la UPSA.

Pregunta (P): ¿Cuál ha sido su evolución profesional en el ámbito de la fisioterapia?, ¿qué le aportó su experiencia en el Real Madrid Club de Fútbol?

Respuesta (R): Llevo más de 22 años construyendo una carrera profesional desde una base técnica muy fuerte a partir del conocimiento y la formación continuada orientada a la terapia manual postquirúrgica y deportiva, así como a la fisioterapia invasiva. Mis primeros años de ejercicio se centraron en la patología traumatológica del mundo de los accidentes laborales y los accidentes de tráfico en hospitales de referencia como FREMAP, Hospital de San Rafael en Madrid y San Francisco de Asís, y también en clínicas privadas, lo que me ha permitido aprender de traumatólogos y fisioterapeutas referentes en cada sector.

 

Posteriormente, dediqué 15 años a prestar mis servicios en las categorías inferiores del Real Madrid Club de Fútbol, donde amplié mi visión multidisciplinar a un colectivo no hospitalario con entrenadores y preparadores físicos. Con ellos, también aprendí mucho de readaptación, y conecté con la inmediatez de la lesión, su abordaje a pie de campo y el manejo del impacto emocional de la lesión en el deportista.

 

P: Usted es el director del Servicio de Fisioterapia de la Clínica CEMTRO, ¿cuál es la clave para mantener al equipo involucrado en proyectos punteros?

R: Desde 2008 lidero a un equipo que actualmente consta de 40 fantásticos profesionales. Junto a ellos, en los últimos 12 años, he implementado cuatro ampliaciones departamentales incluyendo, incluso, cambios de edificio, arquitectura, proveedores, etc… que nos han permitido pasar de prestar 40.000 sesiones anuales a más de 85.000 actuales. Trabajo en un equipo multidisciplinar y tenemos contacto directo e inmediato con traumatólogos, médicos del deporte y quirófanos, y nos permite optimizar los tratamientos y resolver todo tipo de incidencias en tiempo real.

 

Liderar un equipo y sus continuos proyectos pasa por ilusionarles y hacerles partícipes y protagonistas de esos cambios. Pasa porque el proyecto tenga algo de cada uno de ellos -una opinión, una idea, una mejora...- y pasa porque todos ellos puedan seguir creciendo de alguna manera dentro del equipo. Gracias a ellos, a su trabajo, a su esfuerzo y a sus ideas, hemos implantado en los tratamientos la tecnología más actual e innovadora que permite cuantificar la evolución y hacer seguimiento de la misma enfocándonos en metas concretas de manera objetiva. Esto nos está permitiendo comenzar a publicar en revistas de impacto nuestros resultados.

 

P: ¿Cómo compagina su profesión con el ámbito académico?

R: Desde que finalicé mis primeros estudios universitarios, me di cuenta que formación, asistencia y docencia eran el tridente a conseguir y conservar. Apasionado de mi trabajo, me considero una persona con gran capacidad interpersonal y empatía, así como con una clara orientación al paciente, en el que pongo el foco con gran compromiso acercando a éste todo tipo de recursos.

 

Esta pasión y compromiso me han llevado a involucrarme en proyectos creativos que lanzo como iniciativa propia a la dirección de la Clínica y que van, desde el desarrollo de nuevas líneas de negocio a mejorar resultados existentes con reducción de costes. Para ello, una vez más desde la formación y determinación personal, he ampliado mi horquilla del conocimiento al mundo de la gestión y el liderazgo tanto a nivel Universitario (Master Oficial en gestión de Instituciones Sanitarias. UPSA) como de las mejores escuelas de Negocios Internacionales.

 

Esta convicción me ha permitido mostrar una gran versatilidad para mantener una interlocución adecuada con diferentes tipos de perfiles y mostrarme didáctico y resolutivo no solo hacia mis alumnos, sino hacia mis pacientes y stakeholders del mundo sanitario y de la empresa.

 

P: ¿Cuál es la valoración de su trayectoria en la Clínica CEMTRO?

R: Los ya más de 20 años en Clínica CEMTRO me han permitido pasar por todos los puestos del departamento de rehabilitación (administrativo, auxiliar, fisioterapeuta, supervisor…). Estas dos décadas en entorno hospitalario me han posibilitado, también, visitar los quirófanos con mucha frecuencia y tomar conciencia de los daños tisulares vinculados a la práctica quirúrgica y de los tiempos biológicos necesarios de reparación celular, así como de la importancia del inicio precoz del inicio de la fisioterapia respetando estas condiciones.

 

La confianza que ha depositado la Dirección sobre mí me ha permitido y enseñado a dirigir, de forma rentable y al alcance del paciente, una unidad de negocio fisioterápica (referente nacional) altamente especializada en lesiones deportivas y traumatológicas siendo innovadores y vanguardistas en salud y deporte.

 

P: ¿Cómo recuerda su paso por las aulas de la UPSA?, ¿qué recomendación le daría a los estudiantes que se preparan ahora para ser fisioterapeutas?

R: Recuerdo a grandes profesores, todos ellos clínicos con labor asistencial, que nos transmitieron siempre un cuidado muy humano del paciente y a grandes compañeros, muchos de cuales ya venían con alguna formación sanitaria y les miraba con admiración pensando si algún día llegaría a tener tantos conocimientos como ellos.

 

Respecto a una posible recomendación, siempre digo a mis alumnos que deben entender la fisioterapia -y la formación que se adquiere en ella- como un paso en el que van a coincidir con muchos profesores que tienen diferentes puntos de vista sobre cómo abordar las diferentes lesiones. Ellos les van a dar muchas estrategias y un gran arsenal terapéutico y, siempre digo, que hay que salir de la carrera con un maletín de recursos de tratamiento, de recursos terapéuticos, y con la capacidad crítica de elegir en cada momento cuál es que mejor se adapta a la patología y al momento en el que nos llega cada paciente.